El producto BROTOM representa una innovación destacada en el campo de la desinfección, gracias a su tecnología avanzada de activación electroquímica que utiliza para la fabricación de dióxido de cloro.

A través de nuestra innovación conseguimos una cierta durabilidad y estabilidad, con una efectividad que se extiende hasta seis meses, marcando una clara superioridad frente a otros productos en el mercado.

La estabilidad de BROTOM  se traduce en beneficios sustanciales para cualquier entorno que requiera desinfección previa, continua y confiable. La necesidad de reemplazos frecuentes se reduce significativamente, lo que ahorra tiempo y recursos. Esta larga vida útil también contribuye a la sostenibilidad al generar menos residuos de envases y productos desechados.

El dióxido de cloro, componente clave de BROTOM, es una solución desinfectante altamente eficaz y segura que no contiene productos químicos dañinos.

Esto garantiza la protección contra una amplia variedad de patógenos sin poner en riesgo la salud humana ni el medio ambiente.

El uso de tecnología de activación electroquímica asegura una distribución uniforme y efectiva del dióxido de cloro, maximizando su capacidad de desinfección. Además, BROTOM es versátil y puede aplicarse en una amplia gama de entornos  através de su dosificación en aguas.

En resumen, BROTOM se destaca como un producto de desinfección superior gracias a su estabilidad excepcional de seis meses, su seguridad, eficacia y versatilidad. Este innovador producto no solo simplifica la desinfección, sino que también aporta beneficios económicos y medioambientales al reducir residuos y reemplazos frecuentes. Con BROTOM, se obtiene una solución de desinfección avanzada para un mundo más seguro y saludable.